Sobre este blog.

Cuatro años después del Septimo Cigarro, siendo un ex-fumador de tabaco y habiendo dejado de lado muchas de mis depresiones adolescentes, me vi aquí nuevamente tratando de robarle palabras al viento, para inmortalizar y/o dejar ir experiencias. Entre ensayos y esbozos intento recobrar esa antigua parte de mi, que creía había muerto.

13 junio, 2008

Instrucciones para fumar...

No es condición imprescindible el poseer gran perspicacia para notar que el cigarrillo se divide en dos partes. Una más corta que otra, y generalmente de color mostaza oscuro, en caso de que no haya diferencia en el color, podrá notar usted que estas dos partes están divididas por una delgada línea. Ésta parte de menor longitud es llamada “filtro”, parte del cigarrillo que es llevada a los labios al empezar éste complejo proyecto, que es el fumar. Observación importante es el tener en cuenta que los labios carezcan de humedad alguna, antes de llevar el cigarro a la boca, para hacer más placentero el proceso. Dado ya el primer paso, usted debería sujetar, sin hacer mucha presión, con los labios, el filtro. Manteniendo así el cigarro en una posición horizontal, como si se tratase de formar un ángulo recto con respecto al cuello. Paso seguido y seguramente uno de los más complicados en ejecutar, es el encender el punto distal del que permanece presionado por los labios. En este paso se llevan dos acciones a la vez, posiblemente por eso es que se trate del más complicado. Mientras el extremo de la parte más larga del cigarro se está prendiendo, el futuro fumador, deberá atraer el aire del exterior, utilizando el órgano encargado de la entrada de alimentos al cuerpo, sin levantar los labios, se deberá extraer, del cigarrillo, el dióxido de carbono, que es producido al exponer el tabaco al fuego. Hecho esto, el extremo del cigarro expuesto al fuego se pintará de rojo, indicando así que el cigarrillo ha sido prendido correctamente. La parte de color rojo, ubicada en el extremo del cigarro, es llamada braza. El proceso finaliza con una serie de pasos sencillos, estos son: la extracción y expulsión del dióxido de carbono, ofrecido por el cigarrillo. No asombrarse al notar que la parte del cigarro que en un comienzo fue la de mayor longitud, se encuentre más tarde en menor tamaño que el filtro o incluso que se haya consumido por completo, pues cuando el cigarro no es mucho mayor, en longitud que el filtro, es necesario que éste sea apagado o arrojado en el cenicero.

1 comentario:

Anónimo dijo...

me guuuuusta, me gusta... hasta provoca intentarlo (lo digo yo, q no fumo ni un poquito)!!
insito, m gusta tu forma d escribir, pero ya se q no lees... creeme q enriquerecias [mucho mas d lo q ya esta] tu escritura.