Sobre este blog.

Cuatro años después del Septimo Cigarro, siendo un ex-fumador de tabaco y habiendo dejado de lado muchas de mis depresiones adolescentes, me vi aquí nuevamente tratando de robarle palabras al viento, para inmortalizar y/o dejar ir experiencias. Entre ensayos y esbozos intento recobrar esa antigua parte de mi, que creía había muerto.

30 mayo, 2009

Chiste digresionario.

Ayer me contaron un chiste, era un poco largo, y creo que por eso no recuerdo bien como empezó. Era un globo rojo, que estaba volando, uno de esos que tienen helio, el gas ese que te cambia la voz, ¿Si sabes cual es no? Osea, no es que sepa de gases nobles, pero más o menos conozco ese, siempre fui un verdadero idiota para la química, felizmente en mi examen de admisión en la Toulous no entran esos cursos de números, prefiero las letras, y no es por presumir ni nada por el estilo, pero creo que escribo bien, o bueno, de repente, no ¿ok? Pero me gusta hacerlo, por eso me hice este blog, se los linkeo porsiacaso. http://www.septimocigarro.blogspot.com/ para que lo visiten, tengo varios escritos y lo tengo hace unos tres años, lo hice desde que vi el blog de un amigo que se llama Fernando, bueno, amigo, amigo, nunca fue. Es una de esas personas con las que uno le gustaría pasar más tiempo, pero la amistad espontanea nunca se dio, entonces nunca pudimos cruzar más de tres palabras. ¡jajajaja! Hablando de cruzar palabras, recordé que ayer un amigo, me contó un chiste, de un globito rojo, ¿Lo has escuchado? Él me lo contó pero no sabía cómo hacerlo, de repente se puso nervioso o no recordaba bien, y me dio gracia, porque escucharlo hablar fue como escuchar a un niño que sólo parecía hacer una apología a las digresiones, sin llegar al punto, "irse por la tangente" como decía mi profesora de literatura... mi profe de cole, hace tiempo que no sé de mi colegio, siempre lo odie, exactamente desde que entré, que casualidad, cuando entré creo que fue cuando tenía unos diez años, por esa época mis primos, con los que estuve toda mi niñez, se fueron a Estados Unidos y no los volví a ver, eran mis únicos amigos por buen tiempo, y vaya que me afectó su ausencia, tardé mucho tiempo en volverme, lo que se diría "sociable" y bueno, "sociable, sociable" no soy, pero hago el intento. ¡Estoy intentando! Gritó cuando le dije que otra vez estaba hablando estupideces en vez de contar el vendito chiste, del que había presumido tanto, que fea costumbre esa de levantarse los humos o estar constantemente marqueteándose con comentarios, y hablar siempre de uno mismo, eso siempre odie, cuando le conté eso a la psicóloga me dijo que era un renegón, ¡jaja! La psicóloga es lo máximo, en buena hora comencé a ir demonios, ya me comenzaba a estresar por cualquier cosa, cualquier problema y mi cabeza hacía un ¡BOOOM! Como el globo del chiste… ¡jajaja! Ese chiste es muy bueno… ¡Maldita sea!... Bueno… bueno así terminaba el chiste.

1 comentario:

Anónimo dijo...

se escribe Bendito... tontonazo...

y si, eres muy poco sociable, quien sabe ahora, pero cuando conversábamos te faltaba una gran dosis de ello